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Decantación del vino: ¿Cuándo y por qué oxigenar el vino?

  • sebastianguerrera
  • 13 ago 2016
  • 4 Min. de lectura

La decantación del vino es uno de los elementos de servicio del vino que sigue siendo un misterio e intimidante para muchos bebedores. Es probable que tengas un decantador de vino en tu casa, y sin embargo, podés no tener idea de cuándo ó cómo se supone que tenés que usarlo ni para qué sirve oxigenarlo.

Si te gusta disfrutar del vino tinto, entonces la utilización de un decantador es una gran idea para poner en práctica. La decantación puede parecer que no vaya a producir un gran cambio, pero la realidad es que el aumento de la exposición del vino al oxígeno mejorará en gran medida el sabor del mismo al suavizar los taninos astringentes, como también, dejar que la fruta y aromas florales salgan a la luz.

Obviamente, no implica el mero acto de cambiar el líquido de un recipiente a otro. Por el contrario, cuando se decanta una botella de vino, suceden dos cosas: en primer lugar, una decantación lenta y cuidadosa permite que el vino (especialmente los vinos añejos) se separen de los sedimentos que se pueden haber formado, que, si se mezclan con el vino, impartirán un sabor notablemente amargo, astringente. En segundo lugar, cuando se vierte el vino en un decantador, la agitación resultante hace que el vino se mezcle con el oxígeno, con la esperanza de que sus aromas y sabores sean más vibrantes al servirlo.

Decantar un vino joven (sin sedimentos) es fácil: sólo hay que vertirlo en el decantador y dejarlo reposar durante unos 20 minutos antes de servirlo. Como resultado es probable que se observe un incremento dramático en la sutileza y complejidad. Si contás con el lujo de tener tiempo y poder continuar la degustación del vino durante un período de horas, vas a ver que éste va a seguir evolucionando y mejorando. Y no dejes que nadie te diga que sólo se debe decantar ciertos tipos de vino. Es recomendable decantar todo, incluso el vino blanco, si es que lo quisieras hacer.

Decantar un vino más antiguo (con sedimentos) requiere un poco más de finura. Para empezar, el vino ha tenido tiempo de sobra para ganar edad por sí solo, por lo que no necesita ningún impulso artificial. Podés incluso arruinarlo con la sobreexposición al oxígeno. Por lo tanto, no se debe decantar un vino antiguo inmediatamente antes de servirlo.

Te vas a dar cuenta de que algunos vinos necesitan más tiempo para decantar que otros. Por ejemplo, los vinos tintos con alto tanino necesitan más tiempo para decantar, y por lo tanto , un decantador con base ancha incrementará la cantidad de oxígeno y decantará el vino más rápido

Para los vinos tintos con cuerpo ( Cabernet Sauvignon, Petite Sirah, Tempranillo, etc ) te recomendamos que utilices un decantador con una base amplia. Para los vinos tintos de cuerpo medio ( Merlot , Sangiovese, Barbera, Dolcetto, etc ) es aconsejable usar un decantador mediano. Y los vinos tintos de cuerpo ligero ( Pinot Noir , Beaujolais ) se pueden servir en un pequeño ó mediano decantador.

Decantar el vino blanco, ¿ sí o no ?

La mayoría de la gente probablemente piensa que no es conveniente decantar el vino blanco. Sin embargo, hay algunos vinos blancos que realmente pueden beneficiarse de ello, en particular los vinos de gama alta y añejos, ya que a veces pueden tener un sabor un poco desgarbado cuando se vierte por primera vez de la botella. La decantación del vino puede ayudar a abrirlo. Por otro lado, los blancos jóvenes para usos más cotidianos no necesitan decantación. Quizás alguno de ustedes alguna vez consideró decantar el Champagne o vino espumante. Pero, ¿qué sucede con sus burbujas? Decantar el Champagne se ha convertido en una tendencia creciente de las “cosas” que hay que hacer, especialmente con los añejos. Algunas personas encuentran las burbujas en algunos champagnes jóvenes demasiado agresivas. Con la decantación se logra suavizar la intensidad de las burbujas.

¿Cuánto tiempo hay que decantar el vino ?

La decantación puede durar entre 15 minutos y 3 horas. El tiempo promedio es de unos 40 minutos. Acá explicamos con algunos ejemplos:

Para los vinos con cuerpo se debe esperar alrededor de 1-2 horas, mientras que los vinos económicos necesitan oxígeno riguroso para mejorar sus aromas. Podés hacer ésto mediante el vertido de una pequeña cantidad en el decantador y luego volver a cerrar la botella, y agitarla antes de verter el resto en el decantador. Luego esperá unos 20 minutos. Por último la mayoría de los vinos tintos viejos, dependiendo del estilo, tomarán aproximadamente 2 horas.

La cuestión de si, o por cuánto tiempo, hay que airearlo puede generar un amplio debate entre los profesionales del vino. Algunos piensan que un impulso extra de oxígeno puede darle vida extra. Si abriste un vino y parece inexpresivo al primer sorbo, no se le hará daño al tratar de moderar la aireación en un decantador para ver si eso lo transforma. Otros, creen que la decantación hace que un vino se desvanezca más rápido y que, un vino, está expuesto a un montón de oxígeno cuando se arremolina en una copa.

Para finalizar, muchos se preguntarán ¿es realmente necesario un decantador para llevar a cabo este proceso? La respuesta es no. Hay muchas maneras de decantar el vino y no necesariamente implica hacerlo con un recipiente de vidrio de gran tamaño. Por un lado, el acto de verter el vino en una copa de vino también inicia la exposición al oxígeno del contenido dentro de la botella (y si esperás lo suficiente, se decanta). Por último, hay aireadores de vino que introducen una superabundancia de oxígeno al vino haciendo que éste se decante.


 
 
 

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